Brujas, elfos, ninfas y hadas convocan a más de cinco mil personas en el festival de disfraces infantiles
El parque de Santa Catalina vivió un lleno absoluto durante las cuatro horas en las que pequeñas criaturas fantásticas invadieron el escenario de la magia regalando creatividad, imaginación y coreografías
El Carnaval de la magia y las criaturas fantásticas registró un lleno absoluto en la mañana del domingo, jornada dedicada a los pequeños, 1.500 niños y niñas, inscritos en el festival de disfraces infantiles.
El acto, de carácter no competitivo, fue seguido por más de cinco mil personas que ocuparon gradas, patio de butacas y flanquearon de pié los laterales del recinto, en un claro ejemplo del sentido de participación que se vive en torno a la Fiesta de Interés Turístico Nacional.
A las 11:00 horas las dos pequeñas inscritas en la categoría individual y las dos parejas que lo hicieron a dúo se encargaron de romper el hielo, después de ser presentadas por el radiofónico Israel Acevedo. A continuación, cuatro grupos completaron un primer bloque de actuaciones, hasta que la lluvia se coló en el parque y obligó a detener las actuaciones durante quince minutos que fueron aprovechados para secar las tablas del decorado y garantizar la seguridad de las pequeñas mascaritas. Así, la novena actuación salió a darlo todo ya bajo la compañía del sol, que borró cualquier atisbo de lluvia y permitió que la cita se celebrase sin ninguna otra interrupción.
A las 15:00 horas finalizaba la última y quincuagésima quinta actuación, coreografía que ponía fin a un auténtico desfile de criaturas fantásticas en donde no faltaron hadas, unicornios, dragones, duendes, elfos, faunos, brujas buenas y malas, y hasta las que tenían un poco de todo, como la aparición de Maléfica, en diferentes ocasiones, y la presencia ineludible de niños caracterizados de Harry Potter.