Memorias de Carnaval: cuando la ciudad se disfraza
Cada año el Parque Santa Catalina ha mostrado un gran escenario diseñado según el tema en el que se han ambientado las fiestas
En 1976 el Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria salió de la clandestinidad, después de un largo periodo de dictadura franquista (casi cuatro décadas) en el que estuvo prohibido. Habían pasado los años de las Fiestas de Invierno (nombre bajo el que en realidad tenían lugar fiestas de Carnaval encubiertas), y la ciudad volvía a respirar un espíritu festivo antes de la cuaresma.
En esos primeros años de regreso, el Carnaval fue, sobre todo, espontáneo, con unas primera galas de la Reina en el Teatro Pérez Galdós. Pero en los años 80 la fiesta popular comenzó a adueñarse del Parque Santa Catalina con unos escenarios cada vez más grandiosos. En ellos se empezarían celebrar las galas y, luego, los concursos de murgas y comparsas. A lo largo de todo este tiempo, ese escenario ha adoptado el tema oficial bajo el que se han ido convocando año a año los carnavales.
De este modo, y después de que en 1986 el Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria celebrara el centenario del nacimiento del artista Néstor Martín-Fernández de la Torre, Santa Catalina adoptó increíbles disfraces cada mes de febrero: desde Los viajes de Gulliver (1988), Los Mayas (1990) o Aladino y la Lámpara Maravillosa (1994) hasta la antigua Roma (1996), el antiguo Egipto (2000), el Olimpo (2008) o la Magia y las criaturas fantásticas (2018).
En la etapa moderna, el tema de Carnaval se ha elegido por votación popular, siendo los propios ciudadanos, a través de internet, los que han emitido su veredicto cada año entre varias propuestas de la organización. En 2021 la pandemia ha roto esta tradición, pero en el futuro la ciudad volverá a lucir un disfraz temático.
Temas del Carnaval y sus escenarios
1987 |
Centenario del nacimiento de Néstor Martín-Fernández de la Torre |
1988 |
Los viajes de Gulliver |
1989 |
El Mar |
1990 |
Los Mayas |
1991 |
Mozart y la música clásica |
1992 |
Pegaso |
1993 |
El marco incomparable |
1994 |
Aladino y la lámpara maravillosa |
1995 |
El Cine |
1996 |
La antigua Roma |
1997 |
Extremo Oriente |
1998 |
Universal |
1999 |
El Gran Musical |
2000 |
El antiguo Egipto |
2001 |
El Circo |
2002 |
El Caribe |
2003 |
El Rock |
2004 |
Memorias de África |
2005 |
El Quijote |
2006 |
El Carnaval Latino |
2007 |
La Belle Époque |
2008 |
El Olimpo |
2009 |
Los Piratas |
2010 |
La Televisión |
2011 |
Mar y Culturas |
2012 |
El cómic |
2013 |
Gran Baile de Máscaras |
2014 |
El Mundo de la Fantasía |
2015 |
Las Mil y Una Noches |
2016 |
Los locos años 20 |
2017 |
La eterna primavera |
2018 |
Magia y criaturas fantásticas |
2019 |
Una noche en Río |
2020 |
Érase una vez... |
En 1976 el Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria salió de la clandestinidad, después de un largo periodo de dictadura franquista (casi cuatro décadas) en el que estuvo prohibido. Habían pasado los años de las Fiestas de Invierno (nombre bajo el que en realidad tenían lugar fiestas de Carnaval encubiertas), y la ciudad volvía a respirar un espíritu festivo antes de la cuaresma. En esos primeros años de regreso, el Carnaval fue, sobre todo, espontáneo, con unas primera galas de la Reina en el Teatro Pérez Galdós. Pero en los años 80 la fiesta popular comenzó a adueñarse del Parque Santa Catalina con unos escenarios cada vez más grandiosos. En ellos se empezarían celebrar las galas y, luego, los concursos de murgas y comparsas. A lo largo de todo este tiempo, ese escenario ha adoptado el tema oficial bajo el que se han ido convocando año a año los carnavales. De este modo, y después de que en 1986 el Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria celebrara el centenario del nacimiento del artista Néstor Martín-Fernández de la Torre, Santa Catalina adoptó increíbles disfraces cada mes de febrero: desde Los viajes de Gulliver (1988), Los Mayas (1990) o Aladino y la Lámpara Maravillosa (1994) hasta la antigua Roma (1996), el antiguo Egipto (2000), el Olimpo (2008) o la Magia y las criaturas fantásticas (2018). En la etapa moderna, el tema de Carnaval se ha elegido por votación popular, siendo los propios ciudadanos, a través de internet, los que han emitido su veredicto cada año entre varias propuestas de la organización. En 2021 la pandemia ha roto esta tradición, pero en el futuro la ciudad volverá a lucir un disfraz temático.