Laura Ojeda ocupa el trono del Carnaval de Mar y Culturas

El Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria ya tiene nueva embajadora, Laura Ojeda, con la fantasía ¡Soy Gran Canaria! diseñada por Fernando Méndez para Centro Comercial Alcampo-Telde se hizo con la corona y el cetro de las fiestas.
Los tres jurados presentes en el Parque de Santa Catalina -medios de comunicación, artistas e invitados-, así como el del público coincidieron en elevar a la candidata a la altura de Reina del Carnaval. Cristina Vega, que lució la fantasía Para ti, toda mi ilusión de FM para Centro Comercial Atlántico-Vencindario resultó Primera Dama de Honor; el título de segunda Dama de Honor fue a parar al Centro Comercial y de Ocio 7 Palmas que presentó a la candidata Cristina García Navarro, vestida por Julio Vicente Artiles con el diseño Jade; el puesto de Tercera Dama de Honor recayó en Arancha Alfonso Bejarano, con el diseño 54, de también del diseñador Julio Vicente Artiles para Manualidades El taller y Peluquería Maná; por último, el puesto de Cuarta Dama de Honor fue a parar a manos de Belinda Monroy, que con el diseño Me enamoré de una bruja,  de Miguel Cruz Marrero, representó a Airvema Insular, S.L.
Once candidatas bucearon por el templo de las culturas del fondo del mar en una gala que fue seguida en vivo por cuatro mil personas en el Parque de Santa Catalina, y retransmitida por la Televisión Canaria para todo el Archipiélago. El espectáculo dirigido por Israel Reyes, contó con la chispa y el saber hacer de dos presentadores muy queridos en las islas, el humorista Manolo Vieira y la televisiva Eloísa González, así como con la participación de Malú que interpretó dos de sus temas más actuales.
La Gala, con una duración de tres horas, ofreció en su arranque una obertura que hizo emerger desde el fondo del Océano notas de tradición y evocaciones al carácter cosmopolita de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria. Referencias a otras culturas y gigantes submarinos invadieron el escenario y el patio de butacas del centro neurálgico de las fiestas en una intervención que recordaba el origen e invocaba al futuro de un enclave que es punto de encuentro entre las culturas de otros pueblos, y que hoy nos hace optar a Capital Europea de la Cultura 2016.